Una trágica serie de terremotos sacudieron varias zonas al sureste de Turquía y la zona vecina de Siria. En ambas naciones se ha decretado una emergencia humanitaria, mientras la cifra de muertos, heridos de gravedad y personas desaparecidas sigue en aumento.
El fenómeno, de 7,8 grados de intensidad, golpeó de manera muy particular con epicentro en el sureste de Turquía y en zonas cercanas de países vecinos. Hasta el momento perdieron la vida más de 1.000 personas y ha dejado 2.500 heridos entre los dos países.
El sismo, que se produjo en la oscuridad de una mañana de invierno, se sintió también en Chipre y Líbano.